La postmodernidad indica que ya no hay grandes relatos, sino apuntes de apuntes. Desaparece el autor y vienen los críticos literarios y cinematográficos, que combinan su opinión sobre el hecho cultural (libro, conferencia, disco...) con unos saberes transculturales. A este respecto los periódicos lanzan suplementos literarios: * Heraldo de Aragón: los jueves * ABC: los sábados * El Mundo: los viernes * El País: los sábados La referencialidad de nuestros relatos ya no es directa, sino una fusión de voces diferentes que aunamos en un tejido nuevo (textus) y que relaciona diferentes épocas de la historia con nuestra vida personal. Eso es un blog. Chartaceum
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