La polémica renacentista sobre si debemos imitar a Cicerón (como propone Escalígero) a a una nómina plural de autores (Erasmo de Rotterdam) llega a España de la mano del alcañizano Juan Lorenzo Palmireno en su De vera et facili imitatione Ciceronis. En esencia, los profesores aragoneses y valencianos adoptaron la postura a favor de Cicerón, aunque contagiados de cierto erasmismo. En cuanto a los temas de los que no trata el Arpinate, como medicina, historia o agricultura, Palmireno recomienda acudir a autores clásicos como:* César
* Terencio
* Celso
* Columela
* Vitrubio
* Quintiliano
* Catulo
* Horacio
* Virgilio
* Ovidio
Hoy en día la polémica no es tan aguda como entonces, pero es cierto que cada universidad elige sus autores para selectividad. Yo, por mi parte, en la reunión del curso pasado presenté una propuesta de incluir a Tácito entre los autores de selectividad y fue aceptado por mis compañeros aragoneses. Creo que la selección de los autores se debe hacer de forma democrática en nuestras asambleas y renovar el repertorio de cuando en cuendo para no quedarnos fosilizados. Eso es el significado de la palabra Renascentia (´Renacimiento´).
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