He estado leyendo estos días la Carta sobre el humanismo de Martin Heidegger. El filósofo alemán sitúa el humanismo como un paso atrás de la humanidad, un estadio anterior que ha superado el hombre moderno, más cercano al nihilismo. El olvido de la metafísica llevaría al hombre a un paraíso pre-histórico, donde no caben especulaciones irracionales. El abuso de la razón ha llevado a Occidente al estado totalitario alemán, superado con creces por el relativismo de la democracia estadounidense.En lo que respecta a nuestra profesión, humildes profesores de latín y griego, no cabe sino enseñar una civilización perdida, que no sabemos si es la retórica política, la literatura griega o la ingeniería romana. Hay varios modelos de clasicismo que, comparando los diferentes blogs, salen a la luz en nuestros ordenadores. Pero, en definitiva, el verdadero clasicista es el que saca a la luz la Edad de Oro, ese estado de la sociedad perfecta en que no hay enfrentamientos.
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