Mi teatro es el Teatro del Mercado de Zaragoza. Cuando quiero ver una obra buena a ciegas, elijo la que haya allí, sea comedia o tragedia. El criterio que tienen en la programación es como el mío.
Hoy he "vivido" Dirección gritadero. Y digo vivido porque el teatro no se oye como un concierto ni se ve como una película: se vive. El planteamiento era de tres mujeres que esperan un autobús que nunca llega. El tema me parece clásico: Esperando a Godot de Samuel Beckett, sólo que ahora las que esperan sólo quieren ir a la última parada de la línea para gritar. La obra nos plantea escenarios para gritar: una sala de casa, el autobús, la calle. Cada uno tenemos una razón distinta para gritar y esa razón es personal e intransferible. Los internautas sabemos que cuando queremos gritar en la red escribimos las palabras en mayúscula. Pero todavía hay más escenarios para gritar...
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