lunes, 25 de octubre de 2010

EL CAMINO DE LA DISTANCIA

El catedrático de filosofía Ignacio Izuzquiza ha explicado hoy en una conferencia en el Centro Pignatelli de Zaragoza el sentido de buscar el ideal a través de la distancia. Todos tenemos un horizonte, que algunos lo sitúan en la montaña, otros en el desierto y otros en el mar. Frente al cotilleo de los espacios cerrados, se propone una apertura a la libertad mediante el necesario esfuerzo. El ponente afirmó que crear distancias es saludable y que la auténtica sabiduría supone una atmósfera aromática.
Nuestra casa nos es a veces incómoda y buscamos otro domicilio donde realizarnos. En el viaje a Ítaca descubrimos que peregrinar es una constante del ser humano. Nuestro objetivo siempre es pasar de vivir el mundo a habitarlo. La vida nos es dada, pero construir nuestro espacio supone realmente habitar el mundo.
Lo último que ha comentado Izuzquiza es que el modelo de discipulado de todo profesor se basa en el pasaje de los discípulos de Emaús (Lc 24, 13-34): el maestro como un caminante más que al final es reconocido por sus discípulos.

No hay comentarios: