Un artículo de opinión del Heraldo de Aragón de hoy, firmado por Domínguez Lasierra, compara la vida a un palimpsesto; esto es, un manuscrito raspado, reutilizado para una segunda escritura (codex rescriptus). Cita el ejemplo de Joyce, al que todos los biógrafos describían como míope, cuando en realidad era hipermétrope. Esas biografías se tienen que reescribir para dar otra lectura, que tampoco será definitiva.
Viene esto al caso porque ayer en una tertulia literaria en Zaragoza me preguntaron como helenista el origen de la palabra: palin ´de nuevo´ y psestós ´raspado´. Deslumbramos los clasicistas cuando conocemos las etimologías de casi todas las palabras del diccionario. Pero mantener el lenguaje culto es difícil en un entorno llenos de bares ruidosos y de calles infestadas de coches. Codices rescripti.
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