Hoy miércoles he ido con un amigo a la ciudad de Fraga en Huesca. Mi amigo tenía que hacer muchas gestiones en la capital del Cinca. Yo he aprovechado para charlar con la directora del instituto Bajo Cinca, que a la sazón es profesora de griego.
La conversación ha girado sobre el futuro de nuestras tres asignaturas en la Comunidad de Aragón: latín, griego y cultura clásica. Hay cierta incertidumbre sobre lo que pasará cuando el curso que viene se implante en 4º de ESO la Ley Orgánica de Educación y se imparta latín, novedad de la LOE de Zapatero.
Hay muchas esperanzas depositadas en recuperar el papel que la LOGSE nos quitó a los clasicistas. Pero ocurre que en Aragón no hay 3 itienerarios para cursar el último curso de la ESO: física y química, biología o latín. Ante el vacío legal de gobierno autonómico, a los profesores no nos queda más que plantear la defensa de la asignatura en cada instituto: una especie de reino de taifas. Queda claro que todos los clasicistas debemos tomaruna única postura, privilegiando las asignaturas con contenido y desplazando a las que son meramente instrumentales, como informática o dibujo.
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